Muertos otros dos soldados norteamericanos por ataque de la resistencia en Iraq

Testigos del suceso afirmaron que los efectivos viajaban en un camión cisterna militar que fue dañado por una detonación alrededor de las 07:50 horas (local).

Esta fue la segunda operación de hoy lanzada por la resistencia, después de un ataque con explosivo contra una oficina del Consejo Supremo de la Revolución Islámica de Iraq, considerado el mayor partido de base confesional chiíta.

Esa organización fue una de las más fuertes formaciones políticas opositoras armadas que enfrentó a la derribada administración de Saddam Hussein.

El jefe de ese partido es Abdelaziz al Hakim, presidente de turno del Consejo de Gobierno transitorio impuesto por los invasores.

Según testimonios, la explosión, realizada por control remoto, tuvo lugar a las 05:00 horas (de Bagdad) en una antigua oficina del ex gobernante Partido BAAS, un local ocupado por paramilitares del Consejo Supremo, donde una persona murió y otras ocho recibieron lesiones.

También este viernes, el gobernador norteamericano en Iraq, Paul Bremer, confirmó haber escapado de un atentado ejecutado por miembros de la resistencia el pasado día 6.

Bremer ratificó una información adelantada por una televisora norteamericana respecto a la detonación de una mina terrestre contra una caravana en la que viajaba el principal funcionario de Estados Unidos en Iraq.

Por otra parte, en Londres, el grupo de investigación Organismo de Recuento denunció que más de 10 000 civiles perecieron en Iraq a causa de la agresión de Estados Unidos y Gran Bretaña.

De acuerdo con el cofundador de esa agrupación y actual director ejecutivo de un equipo de especialistas de la Universidad de Oxford, John Sloboda, unos 2 000 civiles murieron a causa de las acciones de las fuerzas de ocupación desde el primero de mayo pasado.

PROSIGUE ESCÁNDALO POR FRAUDE DE HALLIBURTON


REUTERS

WASHINGTON.— Una auditoría interna de la empresa petrolera estadounidense Halliburton advirtió los problemas en el contrato para entregar combustible en Iraq, incluso antes que investigadores del Pentágono lo descubrieran.

El senador demócrata Joe Lieberman declaró que una fuente del Pentágono le comunicó el rechazo de Halliburton a entregar las copias de su auditoría interna a los investigadores del Departamento de Defensa.

La petrolera, con sede en Houston, ha sido acusada por auditores del Pentágono de inflar la tarifa de los embarques de gasolina que la firma lleva de Kuwait a Iraq, mediante un contrato con el Departamento de Defensa.

Autoridades del Pentágono sospechan que la firma KBR, subsidiaria de la Halliburton, había sobrefacturado cheques de combustible por 61 millones de dólares. Los auditores recibieron la información de una empresa kuwaití que vende la gasolina a la KBR.

http://www.granma.cu/espanol/2003/diciembre/sab20/muertos.html